Lincoln College Huechuraba
El equipo de básquetbol del Boston College Huechuraba enfrentaría la final de la Categoría Intermedia en Promoción, donde debía medirse al gran equipo de Miguel León Prado en el Gimnasio del Colegio Sagrados Corazones de Alameda.
Un partido que desde el inicio fue duro y parejo, donde los dos mejores equipos de la categoría daban muestras de querer ser coronados como líderes de la Copa Soprole.
León Prado con una defensa individual y presión de todo el campo, provocó inconvenientes a las águilas de BC Huechuraba en algunos pasos del primer cuarto de juego. Boston College Huechuraba dejó todo en cancha con una buena defensa individual, pero poniendo mucha presión sobre los dos mejores jugadores del L. Prado, destacando para nuestro equipo la actuación de Mauricio Bustamante que desde el inicio fue la mejor mano de las águilas, con 8 puntos. Mientras que la segunda carta ofensiva que poseía el DT Mauricio Valenzuela, Agustín Allegrini, fue doblado y triplicado en la marca.
En el segundo cuarto, Boston College Huechuraba fue de más a menos, destacando un gran comienzo durante los primeros 3 minutos de la mano del incansable Ignacio Orrego (base de las águilas), de esta forma tuvieron su mejor momento en el cuarto, pasando arriba en el marcador por una diferencia de 4 puntos.
León Prado cambió su estrategia a zona defensiva, y volvió con la presión zonal en todo el campo, manejando de mejor manera la segunda mitad del cuarto, pasando arriba en el marcador y cerrando el cuarto por 7 puntos la primera mitad de la gran final de Copa Soprole.
En la segunda mitad, ambos colegios disputaron cada balón, con sus máximas capacidades. El marcador cambió varias veces de dominio. Los técnicos variaron varias veces sus estrategias, tácticas defensivas y ofensivas.
A pesar de las ganas del equipo Bostoniano, León Prado obtuvo un mejor cierre del partido (y del campeonato) para quedarse con la victoria y el título de campeón de la categoría Intermedia.
Boston College Huechuraba por su parte, se queda con un merecido segundo lugar y con la satisfacción de subir a un podio, que para esta generación había sido esquivo durante tres años.